Sarai, ¿Dónde están Anchonio y Guille?

Voy a comenzar con el relato desde la llegada de Alba y yo a Marde. Ahí nos encontramos a Guille deambulando, muy barbudo, que se alegró de ver que le habiamos comprado yonki cola! Hablamos con el un rato, nos echamos unas risas y poco después llego el fabuloso Mr Anchonio! que tenía una sarnación especial (como Sevilla y su color). El caso es, que este último, andaba especialmente nervioso, porque, según alegaba, ya se había tomado dos copichuelas antes de llegar. Fijaos hasta que extremo no llegaba su sarnación, que pasó un pokero por fuera de la pecera del metro y Anchonio se puso a dar berridos cual bestia en celo. Claro, el poki, que es el más ''shuloh'' de todo el barrio se puso gamba y llegamos a pensar que querría pegar a Anchony. Menos mal que no fue así.
Poco después llegaron Elena y Raquel con más munición de bebida... todavía quedaban Dani y sus amigos... pero aún así, nos fuimos al parque a empezar a beber. Cuando llegó Dani (o mundialmente conocido como ''pastelero'') nos echó la bronca por habernos colocado en aquel lugar del parque; así que, cuando llegaron sus amigos, nos cambiamos de sitio.

Y aquí, mis queridas amigas, es cuando empieza la noche loca. Lo que primero hicimos, como buenas féminas, fue examinar el material que acompañaba a Dani. Eran tres chicos: Luis, Javi (chaqueta cuero) y Javi. Luis y Javi (chaqueta de cuero) causaron bastante buena impresión. Sobre todo Luis en un principio (rubio, alto, sonrisa profident, ojos azules...bufff)
Se acoplaron a beber y la primera hora fue un poco aburrida porque aún nadie se socializaba con nadie. Hasta que Anchonio no comenzó a dar su espectáculo la cosa no se fue animando...
Entre tanto, empiezan las primeras meadas y las primeras paridas de la noche, con Alba y su fabuloso negrita que le subió de manera instantánea... jajajaja

Comenzamos a hablar con los amigos de Dani (yo por ejemplo hablé con Luis de que estudiaba y con el otro Javi), y a observar el espectáculo: Anchonio tirado en un banco con la boca abierta hablando en Andaluz. De ahí, salió un tema interesante: Javi y Luis nos contaban que a los madrileños nos tienen mucha manía porque supestamente somos ''chulos''. Estas fueron nuestras primeras tomas de contacto. De esto se derivó, constantes comentarios de Alba (que en que hora la dije que Luis estaba buenorro), de que este no hacía nada más que mirarme. Yo la verdad, no la creía...jajaja como estaba medio piripi ya...
Anchonio desapareció y Guille tuvo que ir a buscarlo... y mientras Javi (el menos agraciado) gritaba que sin Anchonio, él no continuaba la fiesta jajaja. Alba comenzó a grabar vídeos, a hacer grabaciones de voz... madre mía... eso empezaba a ser el desmadre padre.
La cosa que hacia las dos, o así, nos dió por llamar a Julio y joderle el sueño. Empezamos a llamarle cacas por no haber venido, a fingir orgasmos (que vergüencita), y demás paridas... Julio estaba sobadísimo pero según él, andaba por casa de un amigo...
Al poco rato, se acabó la bebida y decidieron partir de marchuki. Dejamos atrás a Anchonio y Guille (que ya habían vuelto, con el ano, no sabemos si abierto o no) que pretendian irse a su casa... o al Nueva Visión, a saber. Nosotras, acosamos a Rubén a toques, mientras íbamos camino del taxi, para que nos llamara. Y en efecto, lo hizo... nos reimos mucho y debió pensar que qué clase de personas trabajaban en apoyo a su mando...

Paramos al taxi, y adivinad quién era el conductor... ¡un hombre que se parecía a Saramago! jajaja me emocioné y todo xD... Elena y yo intentamos aclarar a Rubén que no íbamos pedo... que controlábamos... pero por lo visto no sonó muy convincente...
Ya en el garito, dejamos nuestras pertenencias en el ropero y nos abalanzamos como posesos en busca el elixir mágico: la bebida. Alba y yo nos pedimos un mojito y el resto supongo que ron o cosas por el estilo. Empezamos a bailotear gitaneo (claro imagináos la situación: entras en un garito medio pokeril y lo primero que escuchas es eso... yo ya me esperaba lo peor) y nos acosaron unos wachupinos que querían restregar cebolleta... por suerte se fueron rápido. Se empezó a animar la cosa, y me dí cuenta que Alba tenía cierta razón al decirme que el rubio no paraba de mirarme. Al poco tiempo me llama Dani (con tanto peligro como Fellipe) y me planta delante al rubito y me dice que baile con tal bombón... a mi me entró la vergüencita y no se cómo me escabullí para volver a mi posición inicial. Empezamos a bailar con los Javis y a echarnos unas risas... nos fuimos hacia otro lugar con más espacio porque parecíamos piojos en costura. En el nuevo lugar nos pusimos a bailar menos apretados todos, a hacernos fotos,...Dani continuaba intentando encalomarme al rubio. Mientras tanto Alba bailaba calurosamente con los Javis y Elena y Raquel también bailaban juntas. Alba le perdió la copa a Raquel cuando esta se fue a hacer pis. Misteriosamente, dos o tres días después, resolvimos el intríngulis: resultó que mientras nos hacíamos fotos, Alba me dió una copa a mi... yo no sabía de quien era, así que, cómo vi a los chicos sin nada en las manos, se la endosé... Después de este inciso de la bebida, yo me empecé a poner malita, porque me agobiaba con el humo... Me fui a respirar aire con menos humo (me acompañaron Elena y Alba). Cuando me encontré un poco mejor, me fui a sentar un poquito. El rubio se sentó a mi lado e intentó establecer conversacion... yo le contestaba en la medida en que pude... Luego apareció Alba, que me preguntó si me pedía algo y la dije que sí, una botella de agua. Bueno, pues ella empeñada en que me iba a pedir un brugal con cocacola... y yo: que no!! que yo no quiero beber más, de verdad!! jajaja aquí debe de ser que el rubio vió su oportunidad de acercamiento y después de realzar la dulzura del brugal me dijo seductoramente (jajaj esto último de ''seductoramente'' es para darle emoción): si quieres nos lo tomamos juntos... jajaja a lo que yo le respondí indignada: NO, yo sólo quiero agua!

La noche prosiguió con más bailes. Hubo un momento calenturiento en el que menos el rubio que era un sosainas y yo que estaba pochilla, todo el mundo estaba bailando sexymente. Luego me recuperé un poco y pude seguir bailando con las chicas, Dani (que arrimaba mucho), el rubio... Alba alegaba que los sandwiches la ponían...jaaaaarl!
Salimos del garito sobre las 6 menos algo ya dispuestos a coger el metro. Alba iba gritando por ahi: El mundo está mal repartido! y cosas varias jajaja yo mientras andaba rápido porque quería volver a casa. Estos cogieron un taxi (panda pijos!) y nosotras que somos más campechanas cogimos el metro... Raquel se quitó los tacones porque ya no aguantaba más... El metro nos timó varias veces a Alba y a mi, pero al final lo cogimos y llegamos a casa SANAS y SALVAS.

¡¡¡¡FIN!!!!